miércoles, diciembre 23, 2009

La competencia está reñida

Hasta el 31 de diciembre, se cierran las votaciones para el Premio Semifusa de Literatura, les pido su voto para mi blog en:

www.revistasemifusa.blogspot.com

¡Corran la voz!

domingo, diciembre 20, 2009

la distancia

la distancia es todo lo que no quise que fuera
esta ciudad friolenta cubierta de bufandas
la pregunta ¿quién recibe las regalías de los libros de Kafka?
o bien
¿recuestas tu cuerpo en otra parte?
espero que no
que tu cuerpo tendido sea solamente un recuerdo en mi colchón
la distancia es soda cáustica royendo mis entrañas
dos mil kilómetros que se convertirán
en cinco mil kilómetros
de lejanía
yo nunca quise irme
nunca quise que te fueras
me gustan los poemas vistos a través de un telescopio
le hace falta más sinceridad al mundo
y a mí
y a vos
me gustó
el mensaje que te envié valiéndome de las telecomunicaciones:
“quisiera estar encima de ti
(…) me contigo
(…)te
y luego dormir y que me quites la colcha”
no me gusta que fumés en la cama
pero ahora que no estás
me gustaría que fumaras en mi-cama

la distancia es todo lo que no quise que fuera.

martes, diciembre 15, 2009

caos sideral

caos sideral de luces brillantes y asesinas
caos rectangular de noches suspensivas
palabras nuevas

puericultor, no entiendo
nada de lo que sucede aquí
ni el sonido interrumpido
hierbabuena
focas
soy un error ESPECTACULAR atravesado por avenidas
e hipopótamos líquidos

oraciones repetidas
ven, yo misma
ven, rájame, vuelve a ser mi alimento
mezclado con las marcas de la nariz

esta época nos está mirando

hipocondríaca
automática
hipotenusa
inconsciente
y cruel

caos sideral,
no encuentro la puerta ni la esquina

¿dónde me dejé que no me hallo?
(tengo culpa)

nunca volveremos a ser los niños que fuimos.

domingo, diciembre 13, 2009

A Jorge, por todos estos días:
es difícil juntar mapas
en medio de este caos sideral
y el aerosol rojo de estos días insumisos
e ir atropellando la tos con los ojos
y meter mis dedos en tus glóbulos linfáticos
beber la aceptación de verte ser tal cual viniste
luchar aceptar conocer concebir
el paisaje de los rombos y las grupas de las líneas vitales
(que son muchas)
es difícil juntar lo que fuimos
verte dormir mientras yo despierto
y sentirme de pronto la llave
para que escapes de tu insonora incomunicación
sal del cuarto
desviste el desliz de mis avestruces
que están empollando
el sol rosa de diciembre
mezquina la distancia que nos separa
es difícil juntar el mapa de tu emporio lunar con el estetoscopio de esta época
noches excesos metáforas férreas
es difícil no ser tu sangre
y el mapa circular de tus astros.

Buena noticia

Eva Cabo, Pablo Ibañez, Jorge Palomares y yo creamos

www.casamanitacartonera.blogspot.com

Una editorial que nos ayudará a hacer muchos sueños realidad

Enhorabuena

Yujú

viernes, diciembre 11, 2009

A Jorge:

¿Por qué sigue abierta la puerta?
¿Por qué las semillas de los dátiles son líneas profundas?
¿Por qué pareces saber tanto de mí y aún así tus ojos me rehuyen?
¿Por qué de pronto tu mano y tu cicatriz me buscan y tu centro es un cilindro al que quiero volver a tener en medio de la lengua?
¿Por qué el olor a tus mangas es la emperatriz a la que quiero desvestir?
¿Por qué estoy pensando en tu abdomen mientras fumamos un nombre compuesto y tu mirada oscila entre mis dedos?
¿Por qué tu pie derecho me remueve las ganas de esta tarde de equívocos?
No importa
Déjame tus ojos, tus labios y que sigan abiertas todas las puertas del mundo

II

ven, llévame a la cama
acércate
no te precipites
sube mis piernas hasta tu reloj
fáltame el respeto debajo de las estalactitas
ven, mírame con tus ojos de lunares
come de mi aire las enredaderas
abusa de las buganvillas
ausculta la masa de mis himnos
conmemora la línea delgada que quiso unir el olor de nuestros párpados
alégrate de nuestros huesos
calcínate en el deseo
ha pasado tan poco tiempo que no quise sacar las raíces de su cicatriz
ni la clorofila de las plantas
ven, escurre de una vez mis filamentos
posee mis neuronas que están agonizando
arrebata la luz y los ferrocarriles
pégame con una cinta cóseme engrápame y estámpame
sintetiza mis absurdos silábicos
radioactívame para que me ilumine
esdrújula mis ansias
polinízame
quiébrame en gotas
escúchame gemir toda la noche

III
Se ha quebrado una taza en la cocina
A estas alturas, se han quebrado demasiadas cosas
¿A dónde van los restos rotos?
Si se rompe un corazón ¿Dónde se colocan los pedazos?
¿Hay un lugar dónde se acumulen las luces vueltas sombras, el atardecer de ayer o los besos que se niegan a entregarnos en un juego siniestro que nos desgasta?
Quiero encender la luz y barrer los pedacitos
Aprender a defenderme de mi dolor continuo e inexplicable
Negociar el aprender a diario
La intensidad del cuerpo
El movimiento
Los volúmenes geométricos

Hoy se ha quebrado el ruido, el suelo, la bolsa, una escuadra, la economía mundial, varias partículas
¿Dónde ponemos lo que fuimos sin serlo?
¿Dónde se guardan los pedacitos?
Han pasado pocos días y no quiero estar rota ni tener ganas de llorar en todas partes
Quiero que lo único que se rompa de mí sean mis labios de tanto besarte.

domingo, diciembre 06, 2009

La cocina

es domingo
campanas suenan
la luz torda nos abre los ojos
el pan tostado sale
muerdes masticas te ríes
se cae el café
me quejo
te ríes
quemas las mantas
te ríes
el alcohol permanece en la cabeza
calentamos la sopa
riego las plantas
pones los platos
arriba a tu derecha hay miel
partís los limones
la mesa la cocina
me miras te miro
decimos ‘qué gran noche la de anoche’
espera, yo voy
pásame las tortillas
pijama
mezclilla
nos besamos
al otro lado de la ventana: la vecina
me miras
me sigues con las manos
me metes las manos
me mides
nos medimos
en el espacio de un nosotros repentino:
es la alegría.

viernes, diciembre 04, 2009

El velorio del cantor

Te recuerdo Víctor

Un adiós sencillo, pero multitudinario, fue el que se hizo después de tres décadas para velar los resto del cantautor chileno. Aunque aún no se encuentra al homicida de Víctor Jara, para sus más cercanos, en su asesinato hubo justicia. Hoy, Víctor es inmortal.

Autora: Carolina Rojas, desde Santiago

Eran las doce del día y entre cambio y cambio de guardia de lejos se oían las canciones “El arado”, “Paloma quiero contarte” y “Derecho a vivir en Paz”. Entonces se acababa todo lo solemne y los presentes contenían el nudo que desgarraba la garganta en ese acto de tragar la saliva para no llorar. Pero no todo era tristeza, al fin se pagaba esta deuda de hace más de 36 años: el primer funeral del cantautor fue clandestino. No hubo flores, ni carroza. Fue un secreto que guardó Joan Turner, su esposa, sus dos amigos y el sencillo nicho del Cementerio General.

Pero hoy están sus canciones para hacer volar al sus seguidores, volar hasta ese Víctor de sonrisa amplia, guitarra y de poncho negro de puntas rojas, la misma prenda que el jueves cubría su féretro.

Hasta el galpón que lleva su nombre, ubicado en la Plaza Brasil de Santiago llegaron a despedirse el presidente del partido comunista Guillermo Tellier y la presidenta Michell Bachelet.

Desde que a fines de octubre el ministro Juan Fuentes Belmar reconoció que el cantautor había muerto de un shock traumático, producto de los más de treinta impactos de bala de su agresor, los restos fueron devueltos a su familia. Desde entonces, su velorio y su funeral póstumo eran uno de los eventos más esperados por los seguidores de su música.

Víctor Jara fue acribillado el 16 de Septiembre de 1973 en el Estadio Chile y arrojado a unos matorrales cerca de la Carretera Sur de Santiago. Luego llevado a la morgue, donde más tarde fue identificado por su esposa. Para sus más cercanos, su asesino no logró su objetivo: hoy Víctor es inmortal

En el velorio, de vuelta estaban los buenos y los malos recuerdos: el golpe, los ejecutados, pero también los ojos de Víctoren una gigantografía a un costado del féretro. Estaba rodeado de coronas de flores del Comité Central del Partido Comunista y de los estudiantes ex UTE( Universidad Técnica del Estado) de 1973 que estuvieron junto a él durante su detención.

Ese 11 de septiembre, hace más de tres décadas, después del bombardeo del palacio chileno y de la muerte del presidente chileno Salvador Allende, 600 estudiantes y profesores se pronunciaron en la UTE. Al día siguiente, entre gritos, empujones y culatazos que jamás olvidarán, los académicos fueron llevados al estadio Chile. Entre ese grupo se encontraba Víctor Jara, en ese entonces, maestro de la escuela de Artes y Oficios de esa casa de estudios.

En medio de la melancolía, sus compañeros entrañables recuerdan aquel día. Emilio Daroch, se acuerda de aquellos momentos de dramatismo. Él en ese tiempo era estudiante de Economía y quien estuvo junto al cantautor en el momento de su detención. La última vez que los vio fue cuando los militares ordenaron que se apartara “al prisionero Jara”. “Recuerdo que escuchamos una especie de cañonazos cuando ya estábamos en el suelo siendo pisoteados por lo militares. Nos llevaron al estadio Chile donde estuvimos cinco días siendo maltratados física y sicológicamente. Víctor fue separado de nosotros y siempre supo lo que iba a sucederle...”, comenta. Pero a modo de consuelo señala que en esa muerte injusta hay una especie de justicia, aún sin encontrar al verdadero culpable de su muerte. “!Es difícil enfrentar estos sentimientos, sobretodo después de haber visto vivo a Víctor, es fuerte, pero fue en vano. Víctor vive en el corazón de todos y nunca dejaremos de buscar la verdad”, sentencia.

Víctor inmortal

La canción “Abre la ventana” de Víctor Jara fue acuñada para el mural que quedará en el galpón que lleva su nombre y donde fue velado. Lo pintó colectivo Brigada Ramona Parra (BRP). Brigada Muralista del Partido Comunista de Chile que nació al pintar publicidad para la candidatura presidencial de Pablo Neruda y se amplió con la campaña de Salvador Allende en 1970.

En la celebración se dispuso un escenario montado enfrente del galpón por donde pasaran artistas e intelectuales para recordar a Jara. Cuelgan pendones que perpetúan sus frases. “Al pueblo hay que ascender no descender”, palabras como balas devueltas a las posturas mesiánicas de los intelectuales o los poderosos de esa época hacia los más pobres. Víctor, fue el representante de un nuevo movimiento musical que identificó la Unidad Popular y el gobierno de Salvador Allende.

Sin duda una de las imágenes más emotivas fue el rostro pensativo de Joan Turner y el de sus hijas Manuela y Amanda. Aunque no hablarán sino hasta el funeral, se mostraron muy emocionadas en medio de los abrazos apretados de los integrantes de las juventudes comunistas. Joan Turner comentó a sus más cercanos que estaba impresionada con la masiva asistencia del público. Jamás esperó tanta gente.

Pero fueron cinco guardias el preludio para dar el paso al público de clavel rojo en mano que soportó el calor para dejar una flor o acariciar el féretro. Al lado de su ataúd pasaron el Comité Central del Partido Comunista y la Agrupación de Familiares de Ejecutados políticos, pero esta vez junto a una Joan incólume al frente, con la foto de Víctor colgando a la altura del pecho.

Para su más cercanos Víctor Jara a trascendido a la izquierda y al Partido Comunista. El autor de “Te recuerdo Amanda” y “Vientos de pueblo” al fin recibió su merecido homenaje. Así también lo reconoce Jaime Gajardo, presidente del Colegio de profesores de Chile quien también estuvo detenido junto a él. “Este homenaje nos llega en el alma, para mí es emotivo, como parte del grupo que fue detenido en la UTE junto a Víctor y que hablamos con él en esos momentos. La figura de Víctor es transversal y auque su muerte aún no se ha aclarado, este es un paso a la verdad y a la justicia de su asesinato”, confesó.

La emoción llegó en dos ocasiones más, cuando un grupo de niños, conducidos por el Sindicato de Cantores, interpretó frente al féretro el tema “Luchín” y cuando afuera del galpón donde fue velado, los presentes comenzaron a entonar sus canciones.

Por la calle Huérfanos hacia la Plaza Brasil de Santiago, se enfila el centenar de personas que quieren darle el último y anhelado adiós al cantautor chileno: jóvenes, ancianos y su compañeros de detención, los mismos que lo vieron sonreír hasta el último momento. Hacen más 35 grados de calor, pero al público que esperaba parecía no importarle, hoy es el día de Víctor...El sol brilla, brilla, brilla.